En una aldea de Umbría (Italia), vivía un hombre que siempre se quejaba de su suerte.
Era cristiano, y hallaron el peso de su cruz demasiado pesada de llevar.
Era cristiano, y hallaron el peso de su cruz demasiado pesada de llevar.
Una noche, antes de ir a dormir, le rogó a Dios que le permitiera cambiar su carga.
Esa noche tuvo un sueño,. Señor le llevó a un almacén
"Seguir adelante y cambiarlo", dijo.
"Seguir adelante y cambiarlo", dijo.
El hombre vio las cruces de todos los tamaños y formas, con los nombres de sus propietarios. Cogió una cruz de tamaño medio - pero cuando vio el nombre de un viejo amigo escrito en él, dejó a un lado.
Por último, como Dios lo había permitido, él eligió la cruz más pequeña que pudo encontrar. Para su sorpresa, vio que su propio nombre escrito en él.
Por Paulo coelho
Por Paulo coelho
No comments:
Post a Comment